Por curiosidad me he puesto a mirar en googel si venia algo de todas las historias que yo oi en mi casa sobre la represión franquísta, los fusilados ,las de las cuevas..etc.. y me he llevado una sorpresa tremenda..
Una de las primeras personas que se puso en España a buscar fosas, fue Esperanza Perez, y resulta que es de mi pueblo, Cevíco de la Torre, aunque nací en Torrelavega toda mi familia y mis raíces están en ese pueblo en el que pasaba todos los veranos y un invierno entero cuando pase la polio..
Estaba pensando que todas aquellas horrorosas historias que oía en mi casa quizás nunca se sabrían, y si no seria hora de contarlas, pero veo que ya ha habido personas que se han dedicado a ello y esta todo bien documentado.
Pero quizás no esta mas contar lo que yo escuchaba.
Mi bisabuelo Paco,( Francisco Alba) que era como yo, tocaba la guitarra y se me parecía, según mi abuela, Había perdido casi todas las tierras jugando en el casino, le llamaban el saltalindes, porque por las noches movía los muros para ampliar las propiedades, y cuando llego el final de la guerra, junto con el cura y el alcalde hicieron la lista de los que había que fusilar, en Dueñas (pueblo de al lado) fusilaron a 120, entre ellos 22 mujeres.. y en Cevico en el muro de el cementerio a otros tantos o mas, ni se sabe creo.
Así que mi bisabuelo recupero todas las tierras y casas que había perdido en el casino, las mujeres e hijos de los represaliados tuvieron que irse a vivir a las cuevas, y mi madre siempre las conoció como las de las cuevas, un estigma que perduro en el pueblo muchos años después, incluso llegada la falsa democracia, de hecho la vecina de enfrente a mi abuela (Remigia), cada vez que se cruzaba con mi abuela se insultaban,y mi abuela siempre decía, "déjala es de las cuevas" era una de las pocas que sobrevivió, ya que muchas murieron de hambre,(se las veía por los campos recogiendo el trigo que se caía de los carros...o comiendo mondas de patatas que eran para las gallinas...etc.. de tuberculosis o falta de atención medica..
En la escuela se sentaban atrás, y las señoritas Nieto (las maestras), nunca las sacaban a la pizarra,y eso aun ocurría el único año que yo fui a clase en ese colegio, unos meses.. yo me hice amigo de una de ellas, la hija de la que después tenia el cine de el pueblo, Angelines, y me abuela me decía que no hablara con ella,y tenia que mentir para ir a verla.
Mi bisabuelo fue un asesino, en un pueblo que fue uno de los tres en e
España donde existieron los últimos alcaldes de fuerza nueva, Martín el ultimo que yo conocí tenia un hijo al que le puso una multa por mear en la calle, y todo eso con don Elpidio, el cura rojo, formaba un conjunto que parecía un pueblo sacado de una película de Berlanga.
para mi son recuerdos de infancia, pero hoy en dia vistos de lejos son la crónica del caciquismo, de un señorito asesino que mato a gente por sus tierras, mas que por ser rojos, fue capaz de fusilar a vecinos a los que encontraba por las calles cada dia o con los que jugaba la partida.
Luego vemos las películas de los nazis y nos horrorizamos.
Aquí no fuimos distintos, queda mucho honor que restablecer, muchos muertos que enterrar y mucha justicia por hacer.
No me siento responsable de lo que hizo el cabrón de mi bisabuelo Paco, pero algo duele dentro de haber oído todas esas barbaridades y haber creído que eran cosas normales.
Hoy en dia la famosas cuevas donde tuvieron que irse a vivir las viudas de los fusilados tienen este aspecto.
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